Están Invitados al grupo en Facebook: Espiritualista Trinitario Mariano, árbol de unificación
Son los que están marcados, porque cuentan con dones o tienen alguna misión. Son:
Puede ser hombre o mujer. Tiene la máxima autoridad en el templo. Es elegido por un llamamiento de Dios, hecho por sueño, visión o médium en éxtasis. Es un cargo vitalicio.
Su papel consiste en cuidar la doctrina correcta, dirigir los ritos, aconsejar a la gente y preocuparse por el mantenimiento del templo.
Es el suplente del guía. Cuando el guía es mujer, normalmente el marido toma este cargo.
Es elegido entre todos los miembros de la congregación. Es el intermediario entre el guía y los demás. Faltando el guía y la nave, dirige el culto. Cuando hay alguna ceremonia, enciende los cirios frente al altar.
Son los que realizan las principales actividades en el templo o se preparan para ello.
Son los intermediarios entre los espíritus y la comunidad. Entre ellos, se distinguen los pedestales o portavoces, que tienen los dones de «palabra, intuición y revelación». Pueden perfeccionarse hasta llegar a ser ruiseñores. Las plumas de oro apuntan los mensajes recibidos por los espíritus.
Las facultades son médiums más entrenados, que pueden recibir espíritus de distintas personas. Entre ellas, hay clarividentes, que pueden ver la profundidad de una persona sin entrar en trance, y videntes, que pueden predecir terremotos, guerras u otro tipo de acontecimientos.
Cuidan el templo, lo limpian, adornan y ponen en orden. Organizan el acceso para llegar a las cátedras o para alguna curación o limpia.
Son los verdaderos miembros de la congregación. Mediante una marca con aceite consagrado, entran a formar parte de una de las tribus del Pueblo de Israel y reciben algún don. Mediante el entrenamiento (desarrollo) irán despertando este don, hasta volverse en médium.
Se trata de gente que no tiene ningún compromiso con la congregación, aunque haya sido bautizada en ella. Acude al templo, cuando tiene alguna necesidad.